Cambiar el "pero" por el "y"
Nos invitan a pasar un buen momento y nos agradaría poder asistir ....
pero ..... nuestra mascota quedó sola en casa.
pero .... tendríamos que ir a preparar la comida para la familia.
pero .... no tenemos dinero para participar de ese evento.
pero .... se hará muy tarde para regresar a casa.
Cuando irremediablemente aparece el "pero", automaticamente se deshabilitan todas las posibilidades y la acción que corresponde llevar a cabo es la que sigue al "pero".
El caso es que en algún lugar nos queda la sensación de "no haber podido" hacer algo que realmente nos hubiera gustado hacer y esto poco a poco nos va sumando una dosis de desconformismo que a la larga o a la corta saldrá disfrazadamente o no a demandarle al mundo una insatisfacción.
Aprender a cambiar la imposibilidad por la posibilidad
Y ..... nuestra mascota quedó sola en casa.
Y .... tendríamos que ir a preparar la comida para la familia.
Y .... no tenemos dinero para participar de ese evento.
Y .... se hará muy tarde para regresar a casa.
Con esta práctica constante de ser concientes y modificar el "Y" donde colocamos "pero" vamos provocando que nuestra sinopsis neuronal comience a desviar "la imposibilidad" hacia cientos de abanicos de posibilidades.
Entonces, nuestros deseos podrán ser resueltos y los impedimentos también encontrarán soluciones.
Y ..... nuestra mascota quedó sola en casa. (esa Y encuentra en la mente a la vecina que adora a las mascotas y puede acercarle comida)
Y .... tendríamos que ir a preparar la comida para la familia. (esa Y encuentra en la mente al marido que mañana practicará su deporte y pude hacernos un favor)
Y .... no tenemos dinero para participar de ese evento. (esa Y encuentra en la mente a la amiga de una amiga a quien podemos solicitarle ayuda para devolverlo mañana )
Y .... se hará muy tarde para regresar a casa. (esa Y encuentra en la mente que hace unos dias se extendió el recorrido y los horarios de un bus cercano )